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Las Tacas 4

Este buceo es un asunto aparte para mi. No porque fue el consecutivo de la inmersión en “Más Afuera” -y honestamente recuerdo muy poco de su recorrido- sino porque al fin se me daría la oportunidad de grabar un acontecimiento muy esperado. Esta vez acompañaría al Pirigüín V. en su reencuentro con las profundidades. Además sería la ocasión para responder a su habitual desconfianza cuando me contestó mordaz “¿y que hay en las Tacas?” el dia que le comentamos ir a excursionar para allá. Con tres muy buenos buceos en el cuerpo, estaba en condiciones de asegurarle que éste no sería menos de lo que le conté.
El buceo se programó en el mismo lugar en el cual mi estimada pirigüina tuvo que deshacer el primero de sus descensos: La Catedral. Ahora sin embargo visitaríamos el sitio alrededor de su torre a unos constantes 15 mt. de profundidad, para evitar molestar oídos sensibles. No puedo explicar con palabras la cara de felicidad que observé durante los veinte minutos que duró el viaje submarino. Era una sonrisa permanente en los ojos de quien disfruta cada segundo de inhalación bajo el agua. Era la dicha profunda de ver, sentir y flotar entre tanta agua, reflejado en una humanidad pequeña que recorría calmada y curiosamente cada rincón. Era creo, el anhelo profundo que se cumple después de meses de espera. Si ella estaba feliz yo lo estaba también de poder presenciar ese momento. Pero dicen que la felicidad tiene su precio y esta vez al subir al bote supe cuanto puede llegar a costar: una cámara fotográfica Sony Cybershot DSC-P73 dentro caja estanca...Así como no puedo explicar la cara de mi pirigüina amiga, no puedo tampoco explicar lo que sentí al haber perdido el juguete con el cual me he sumergido en varias ocasiones solo para lograr captar algo de lo que se vive allá abajo. No solo era dinero el que estaba perdido en algún lugar del océano, estaban extraviados también cientos de pixeles destinados a perecer y no brillar nunca en estas pantallas. Sólo una cosa me consolaba en mi fuero interno: había sido una cámara y no ninguno de mis compañeros ni yo, quienes habíamos corrido esa suerte. Termino de pensar esto y el cielo me premia cual cuento de niños con un hábil sireno saliendo desde el fondo del mar y poniendo en mis manos a mi juguete sano y salvo de las aguas. Final feliz. Del todo feliz. Si no mire la cara de la Pirigüín V en la foto.(ya viene el video clip...paciencia)

Datos técnicos Buceo en La Catedral / Las Tacas/04.03.07
Profundidad máxima:15m./ Tiempo de fondo: 26’/ Tº: 13ºC

Las Tacas 2 y 3

Los siguientes buceos en las Tacas son todo claridad, cantidad y color. La claridad del agua es un asunto tan esquivo en nuestras costas centrales que cuando se presentan 15 a 18 mt. de visibilidad, de verdad es un sueño hecho realidad. Así también la gran cantidad de peces que se pasean sin saber de nosotros los humanos que por otras latitudes hemos arrasado con ellos. Había tantos peces que entendí que el mar ha de ser así. Si no lo ve así, sospeche que algo debe andar mal.
Las colores son otro cuento o bien un cuento de colores para estos acuáticos paisajes. Voluptuosas esponjas no hacían mas que adornar el recorrido con distintos tonos anaranjados y amarillos sobre rocas que escondían vida tras vida entre sus oscuros vericuetos.
El segundo de los buceos en las Tacas fue en un lugar que se constituía por un pasadizo a 30 mt de profundidad y escasos 3 metros de ancho, con un fondo de conchuelas que hacia relucir al sol. El tercero se llamaba “Más Afuera” nombre que lo dice todo porque efectivamente estaba más afuera que el lugar de buceo del día anterior, pero el lugar también podría llamarse “Más Lindo” porque si los anteriores buceos nos habían dejado extasiados de cantidad y color aquí teníamos una sola idea dándonos vuelta en la cabeza: siempre se puede más. Eso ocurre cuando cardúmenes de peces no dejan de aparecer frente nuestros ojos y nos rodean por completo. Eso ocurre cuando los colores no dejan de desaparecer. Eso ocurre cuando se descubre al mar inmenso.

Datos técnicos Buceo en El Canalón/ Las Tacas/02.03.07
Profundidad máxima:26m./ Tiempo de fondo: 44’/ Tº: 11ºC/ Visibilidad: 15-18m

Datos técnicos Buceo en Más Afuera/ Las Tacas/04.03.07

Profundidad máxima:28m./ Tiempo de fondo: 45’/ Tº: 11ºC /Visibilidad: 15m

Buceo en Las Tacas

La escena era auspiciosa. Estuve al borde de las lagrimas al ver a mis entrañables amigos de aguas de nuevo reunidos sobre el bote a punto de zarpar en la Marina de Las Tacas como hacia taaaanto tiempo no sucedia. Un delirio que lamentablemente duraría lo que dura una burbuja en el agua a cinco metros de profundidad: poco. Este pintoso grupete en breve se redujo a solo Manatí y yo en el fondo del mar.(Detalles de lo que sucedió con nuestros pirigüines amigos es mejor obviarlos. Consúlteselo a ellos mismos pues dicen que por la boca muere el pez)
Lo cierto es que nuestro guía submarino de Aquatour nos condujo a un lugar con el original nombre de “La Catedral”. (No hay locación submarina que no tenga una). El recorrido se iniciaba introduciéndonos en una gruta que permitía el paso hacia el otro lado de la roca a una profundidad de 28 mt. aproximadamente, para luego seguir camino a los costados de paredes llenas de grandes y coloridas esponjas con un sin fin de peces a nuestro alrededor. Digo sin fin , porque los cardúmenes no solo se veían a lo lejos, sino porque también uno podía apreciar como se lanzaban cientos de ellos cuesta abajo sobre las murallas de piedras cual tobogán de la mejor feria de diversiones. La transparencia del agua -unos 15 mt aproximadamente- nos permitían despegarnos de los murallones y no dejar de observar claramente estrellas, anémonas, picorocos y cangrejos. Después de 43 minutos de buceo, solo el frío y la reserva de aire hizo que saliéramos a superficie… y ahí en el bote, estaban nuestros pirigüines amigos esperando que les contáramos esto mismo…(continuará)

Datos técnicos Buceo en La Catedral/ Las Tacas/01.03.07
Profundidad máxima: 27m./ Tiempo de fondo: 43’/ Tº: 11ºC /Visibilidad: 12-15m

Declaración

“Tienes un arsenal para tu blog” me dijeron por ahí cuando salí de mi cuarto buceo en Las Tacas. Tres días de buceo -casi casi como en los mejores tiempos- lejos de dejar satisfecha mi bitácora acrecentaron mi curiosidad por encontrame con nuevos escenarios submarinos. Por eso partimos junto a Manatí a explorar nuevamente Punta de Choros. Con tal suerte que llegamos justo cuando el mar se ennegreció por completo. Aun así grabé. Me dediqué a grabar bajo el agua tanto como la memoria de la cámara lo permitía (no mucho) pero los grabé todos. Los claros y los oscuros. Para mi son todos buenos. Algunos se ven mejor que otros pero ninguno refleja fielmente lo que se siente allá abajo y es que ahora, de espaldas al oceano, de regreso de unas muy disfrutadas vacaciones quiero decir algo: Me gusta este océano Pacífico tan caprichoso que siempre sorprende. Me gusta lo que hay debajo del límite al cielo, me gusta su fondo lleno de vericuetos, me gustan sus peces descoloridos, los copuchentos, los escurridizos, los distintos, me gustan todos sus bichos habitantes, eso que se esconden en las rocas, esos que se pegan unos sobre otros, esos blanduchentos y esos que se juntan en montoncitos. Me gustan las pinceladas de color con que se cubre el fondo, las paredes y los senderos de agua. Me gusta cuando el mar mece a los chascones de un lado para otro y cuando las lagrimas de aire suben y revientan para desaparecer. Me gusta todo allá abajo. Pero por sobre todo me gusta sentir por breves momentos que soy parte de un azul inmenso que me cubre por completo y hace que comprenda que soy solo un pequeñopez.
Paciencia que ya vienen los relatos, las fotos y la road movie.