16 mayo 2006

Mes del Mar

Mayo es el mes del mar en nuestro país. Esto ocurre, no a condición inicial del aprecio que podamos tenerle a nuestro extenso territorio marítimo, sino mas bien a causa de un combate naval que para algunos es una hazaña de proporciones, para otros la muestra clara de la costumbre nacional de conmemorar derrotas y para los menos es solo un hecho histórico que no se condice con la inmensidad de las aguas. Lo cierto es que en nuestros colegios el mes entero esta dedicado a girar las cabezas de nuestros niños para mirar al poniente. Así por lo menos era en mis tiempos (no es que tenga tantas décadas, pero para rematar cumplo años en este mes). Recuerdo cómo nos enseñaban acerca de la actividad de los pescadores, los recursos del mar, las millas de territorio marítimo y cómo esperaba con ansiedad la confección del infaltable acuario de caja de zapatos, con pescaditos de papel colgados con hilos de coser y un celofán azul por delante. Notable.
A la mitad de este mes recordé que no he escrito en este blog que supone un querer profundo por las aguas y aquí estoy expiando las culpas porque no hay excusa posible para no haber comentado la conmemoración del inicio del mes del mar con un recital de Los Jaivas en la Isla de Pascua, pasar por alto la venida del Dalai Lama (Gran Océano de Sabiduría en mongol) a principios de este mes, no haber dicho nada acerca del regreso de ballenas azules al sur de Chile y no condimentar con la –a lo menos- insólita noticia de encontrar náufragos vietnamitas en el Estrecho de Magallanes.
A ver si en estos días mi cabeza de pescao hace algo mejor que pedir disculpas y me cuadro con el gran azul.